Bueno, ya ha llegado el ansiado día de salir de vacaciones, preparar el viaje, organizar el equipaje, esto no entra.... los nervios de la partida, se me olvida algo, no puedo dormir, ..... vamos un stress de la leche.
He terminado de planificar la ruta de mañana, ya veremos que tal se da la cosa.... más información en próximas entradas, sigan atentos a la programación...
Día 1, lunes 2 agosto 2010 (722 km.)
Esta noche no he pegado ojo. De que me sorprendo, ya me lo imaginaba, siempre que espero algo con ansiedad me pasa lo mismo.
Salimos en torno a las 7:30, dirección Albacete, autovía para empezar, al pasar la ciudad, nos salimos dirección Tarazona, luego llegamos a Motilla del Palancar, el tiempo se está portando, y yo con mi obsesión reciente por los embalses y pantanos, decido acercarme al Embalse de Alarcón, que no pilla de paso, pero como voy de vacaciones, todo me pilla de paso.
Seguimos hasta el Embalse de Buendía, y seguidamente el de Entrepeñas, con sus mil curvas, a cual mejor, que te emborrachan hasta que no puedes más.
Pasamos Cifuentes y enlazamos con la A-2, la que viene Madrid dirección Zaragoza, hasta Medinaceli, donde paramos a comer, platos de la zona, sin palabras.
Dirección Almazán, Soria, y la cosa se complica, lo que prometían las nubes, se cumple. Tormenta, rayos incluidos, agua a pozales, pero nos agachamos un poco y nos escapamos.
Nos sorprende Olite, y su castillo, pero viendo Pamplona a pocos km., lo vemos desde la carretera. Ya no queda nada, estamos cansados y queremos llegar al hotel. El acceso a Pamplona fácil, no me lo creo, llegamos al hotel a la primera, soy un crack.
Nos cambiamos, hablamos con el recepcionista-camarero y nos indica que andando podemos llegar al centro en 10 min., que majo el tío.
Unos pintxos en la calle Estafeta, en la Taberna Estafeta, para más coincidencias, irrepetibles, nos dirigimos al hotel, estamos reventados, mañana más.
Día 2, martes 3 agosto 2010 (310 km.)
Hemos dormido de un tirón, ni enterarnos de nada, un lujazo. Desayuno, y a la moto, el cielo promete más que ayer, y no va a decepcionarnos, todo el viaje hasta San Sebastián sin parar de llover, eso sí, el paisaje lloviendo no tiene nombre.
Ese olor a hierba mojada, esa luz, la peste a boñiga de vaca, ¡¡ joder que vacas !!, y caballos, y burros, y ovejas, y vascos, y vascas.... una experiencia digna de recordar.
Paramos a comer en un restaurante en una carretera poco menos que abandonada, sin apenas trafico, que mas bien parecía una casa fantasma, pero se han portado bien.
El tiempo mejora, nos vamos a Hondarribia, bonito puerto, más adelante la frontera, y ya en Francia, la cosa cambia: hasta ahora no hemos visto casi a nadie por las calles, la gente se encierra en sus casas o en el trabajo, pero en Francia, la cosa cambia, la gente está en la calle, los niños y mayores.
Hasta ese momento casi pensaba que solo estaba mi moto en 200 km. a la redonda, pero al pasar al país vecino, soy uno más, motos de paso por todos lados, como me gusta esto.
San Juan de la Luz, nos sorprende con sol y calor, ya te digo, como me gusta Francia....
Regresamos por otro puerto de montaña, para variar, hasta llegar a Batzan, el cielo se nubla, pero va de broma, a estas horas hace buena tarde y luce el sol, a ver si mañana se porta igual...
Día 3, miércoles 4 agosto 2010 (350 km.)
Hoy ha sido el día, de los que llevamos de viaje, que mejor nos lo hemos pasado, por lo menos yo, Carmela me parece que no opina igual.
Para empezar, salimos dirección Roncesvalles, por donde pasaremos mañana, y a la altura de Zubiri, cojemos dirección Erro, con la intención de llegar directos a Ochagavía, pero por el camino veo un letrero indicando " la Selva de Irati ", de la cual me había hablado mi "colega" recepcionista-camarero del hotel. Vamos a ver que tal, total, es temprano. IMPRESIONANTE se queda corto, la carretera anunciaba que se acabaría y empezaría un camino, pero no fue así, aunque la diferencia no sería muy grande. Toda de cemento, llena de excrementos de vaca, que parecían de elefante, llena de las dueñas de la "caca", osea, vacas del tamaño de un camión, joder que vacas.
Llegamos a un embalse, como no, rodeado del mayor bosque de hayas de toda Europa, así anuncian la Selva de Irati, y yo me lo creo. Parecía a los decorados de Robin-Hood, no tiene palabras.
Cuando pensaba que se podía seguir hasta Ochagabía, me doy cuenta que hay que volver por donde habíamos venido, no pasa nada, "palos a gusto no duelen", y llegamos a nuestro destino, justo a la hora de comer.
El restaurante muy bien, lleno de mesas alargadas donde tienes que compartir mantel con el vecino, curioso por lo menos. La comida genial, salchicha vasca incluida, con un poco de sidra de la zona.
Salimos dirección Francia, y aquí la anécdota del día: como acostumbro a dejar las cosas para luego, confío en que habrá una gasolinera antes de cruzar la frontera, pero no la hay, y eso no es lo mejor, entra la reserva, y la cosa se pone fea durante más de 60 km. de puerto, primero subida con lluvia y niebla, y luego con niebla y lluvia, acojonado encuentro una gasolinera en un Intermarché, y sorpresa, dos españoles que no llevan tarjeta que funcione en los dichosos surtidores gabachos, pero el Jose tiene solución para casi todo, yo pago con la tarjeta y ellos me dan el efetivo, nos partimos de risa con la situación. Me avisan de que mi vuelta por Isaba está "húmeda", y tanto....
Empezamos a subir un puerto especial para los ciclistas, Pierre St. Martín, precioso, pero con niebla y encima lloviendo, cualquiera se para a hacer fotos, lo dejamos para otra ocasión, bajamos hasta Isaba, un cafelito y hacia el Embalse de Yesa, pero la carretera está cortada y me desvían directamente para Pamplona, pasando por los 50 km. más divertidos del día, curvas y más curvas, asfalto impoluto, de cine.
Llegamos al hotel, tenemos ganas de descansar, el día lo merece, ver un ratito la tele, y mañana más....
Día 4, jueves 5 agosto 2010 ( 347 km. )
Nos despedimos de Pamplona, esperamos que del clima también, de los dueños del hotel en el que estuvimos, prometo volver, se han portado muy bien.
Enfilamos dirección Roncesvalles, nos cruzamos con un montón de peregrinos, hasta llegar al lugar de partida de todos ellos, un edificio de porte grandioso, pero como mi fe es un tanto limitada, seguimos camino de la France.
Le damos las señas al GPS y nos encamina hacia nuestro destino, y aquí viene cuando la matan: para llegar cuanto antes, nos mete por una carretera, bueno, carretera sería decir mucho, pero como siempre, las vistas del Pirineo valen mucho. Nos cruzamos con varios moteros, entre ellos nos sorprenden los dos colegas que ayudamos en la gasolinera francesa, que pequeño es el mundo...
Aínsa, y llegamos a nuestro destino, un hotelito cerca de Escalona, muy bonito, ya lo contaré más adelante...
Día 5, viernes 6 agosto 2010 (367 km.)
Empecemos por el principio. Desayunamos en el hotel, planificamos la ruta el GPS y yo ( esto es cosa de hombres ), bueno, mas bien la planifica el GPS, a mi no me hace ni caso. Dirección Bielsa, por el túnel hasta Aragnouet, siguiendo dirección Guchan, por donde me desvío, el GPS manda, yo solo obedezco, hasta Espiadet, carretera por la que se sube a La Mongie, primer puerto de hoy. Dicha carretera está llena de bichos, ya sean burros, vacas del tamaño de un camion, caballos, ovejas, franceses, ciclistas, francesas,.... que me lio. Hasta una carrera ciclista nos encontramos a nuestro paso, no sin antes haber comido en un restaurante de corte alpino, muy chulo.
Y aquí llega el problema del día: he acortado y me he saltado el Col d`Aspin, imperdonable. Así que , ni corto ni perezoso, vamos en dirrección contraria al Tourmalet, hacemos el Col, y regresamos por el mismo lado, genial, más curvas.
Subimos La Mongie, masificado hasta el extremo, lleno de gente, en invierno es una estación de ski, y en verano se llena de "caminantes", en busca de caminos, que eso sí que tiene el Pirineo.Seguimos camino, y nos acercamos poco a poco al destino de este viaje, se palpa en el ambiente, coches, ciclistas, moteros, y hasta llamas, seguramente de turismo por la zona, ¿ no son del Perú?, bueno, pues había un montón de esos bichos, y yo esperando que alguno escupiera, menos mal que eso solo pasa en la película de Conan el Bárbaro.
Inicio conversación con el GPS, y llegamos a la conclusión de que, o volvemos por donde hemos venido, cosa que descarto, no me gusta volver por donde ya he pasado, o nos hacemos a la idea de que nos quedan 210 km. hasta llegar "a casa". Aquí espezó mi enemistad con el dichoso aparato, mi mujer con él y conmigo y él conmigo y mi mujer, en fin, todos con mala cara, menos yo, curvitas y más curvitas, que gozada.
Llegamos al Col de Soulor, y seguidamente al Col d`Aubisque, caballos descarados incluidos, con un poco de niebla y algo de fresquito, cojemos marcha hasta enlazar con la carretera que nos llevará a España., pasando el Portalet y sus remontes, vacíos en estas fechas, luego toca pasar por Sallent de Gállego, Biescas, Broto, hasta llegar a Ainsa, ya muy cerca de nuestro hotel, ya cansados de tanto viaje.
Una cenita merecida el el hotel, y a la cama.
Día 6, sabado 7 agosto 2010 (50 km. o menos)
Como es habitual en el Tour, despues de la escalada al Tourmalet, hoy toca jornada de descanso, mis chicas se lo merecen, principalmente Carmela, que hasta la fecha a aguantado estoicamente, la otra no dice nada, que le echen km. a la RT...
Hemos salido a dar una vueltecita por la zona, a comprar la comida, hoy toca pic-nic al lado del rio, y así aprovecho y le doy una lavada a la moto, creeme, le hace falta, ya no se acercan a ella ni las moscas...
Pasamos la tarde tirados en el hotel, café y al sobre...
Por cierto, ha pasado por la puerta del hotel la carrera que nos detuvo ayer subiendo al Tourmalet, pero hoy hacía bastante más calor, se lo han currado.
