Los momentos vividos hasta ahora solo son el comienzo de los que nos quedan por vivir.



musica para soñar

sábado, 3 de julio de 2010

Te voy a contar una historia ...

Te voy a contar una historia, la historia de mi vida sobre dos ruedas, llena de recuerdos moteros, de carreras, de recuerdos del circuito de Albacete, cuando mi tío me llevaba con apenas 14 - 15 años, a ver el Criterium, el campeonato de España, ahora llamado CEV, e incluso algunas carreras de Mundial de Superbikes, que tiempos aquellos, de olor a aceite de 2 tiempos, de rueda quemada.

Antes incluso de todo aquello, recuerdo alguna carrera de mi pueblo, cuando de corría por la calle Caudete, el olor a 2 tiempos era inaguantable, pero con los años aquella sensación cambió a la inversa, ahora, para que veas lo que cambia la cosa, me encante todo lo que me recuerda a aquellos años, vamos que me he vuelto un poco "retro".

Más adelante, empecé con un Variant, prestado y sin carnet que cogía a escondidas de mi tía, que tenía bastante con echarle gasolina y hacerle la mezcla, para que el caradura de su sobrino, osea yo, se paseara por Alpera. Hasta que un día mi padre tomó cartas en el asunto, y me llevó a Albacete a sacarme el permiso de ciclomotor, que entonces se pagaba y ya está, te venías al pueblo con él en el bolsillo.

Me apunto al carnet de conducir, pero con el pensamiento de sacarme también el de la moto, para el que me quedaba poco tiempo, pues cambiaban la normativa para que solo se pudiera llevar motos de hasta 34 cv., era enero y me quedaba tiempo hasta diciembre, ya, eso pensaba yo.

Me saco el carnet de conducir, y lío a mi madre para dejarme que me saque el de la moto, menudo soy yo, "pesao" hasta que me salgo con la mía. Empezamos las practicas con una Vespa, pensaba que era más fácil, pero suspendo un par de veces, esto no es para mí, jodidos examinadores, con el cambio de legislación llamando a la puerta, solo me quedaba una oportunidad, y va y se rompe la Vespa el día del examen, pero la suerte estaba de mi lado, y una autoescuela me deja la suya cuando acaben de examinar a los suyos, y paso el examen con "dos cojones".

Luego empiezan las saliditas de paquete, con Ramón y su Goldwing, a algún moto almuerzo, con Campillo y su ZZR a Cartagena, que recuerdos, Valdés me deja su GS 500 amarilla limón, y me doy cuenta que, muy a pesar de los deseos de mis amigos camperos, lo mio es "lo negro", y me decido por una preciosa Bandit 600, que en un principio iba a ser nueva, pero un amigo quería vender la suya, que estaba casi nueva, y enredo a mis padres para que me dejen comprarla, por fin, Jose ya tiene moto.

Y viene la primera "piña", sin importancia, pero que me enseñó a que no hay que confiarse, que Murphy existe, y que su ley és implacable, y el posterior arreglo, para posteriormente conocer a la que ahora és mi señora, la otra joya que tengo en mi vida.

Km. y más km, no tantos como hubiera deseado, pero és lo que había, concentración aquí y allí, conociendo a nuevos amigos que todavía conservo, y otros que lamentablemente se van alejando, ley de vida.

Nos enredamos con nuestra boda, primero el piso y su posterior reforma, y pienso que és buen momento para cambiar de moto, veo un anuncio de la BMW 850 y me gusta, vamos a por ella, miramos por ahí y mi amigo Alejandro me recomienda ir al conce de Valencia, la suya la lleva allí.

Para ese momento, mi buen amigo Fernando, se baja de Mieres a trabajar aquí, y me deja subirme, que no probar, su  RT 1100, ahora tiene cerca de 200.000 km., y la experiencia encima de ella me envenena, así que me marcho a Valencia a ver que pasa.

¿Que va a pasar?, que me lío. La 850 tiene menos cv. que la Bandit, la 1150, con los extras se queda 800 - 1000 euros menor que la RT, mucho más preparada para viajar, pero está la GS nueva, que me encanta, miro a Carmela y me decido por la RT.

Me junto en la cochera con las dos motos, ya que la Bandit no la había vendido, pero en 15 días la coloco, que lástima, se me caen algunas lágrimas cuando la cargamos en el camión que se la lleva, pero giro la mirada y veo la nueva en la cochera, una etapa se acaba, pero comienza otra.

Hasta ahora bien, salidas con los amigos, viajes más o menos lejos, sin miedo ni a los km, ni a las inclemencias del tiempo, incluso viajes al extranjero, inolvidables....

Y ahora me ronda por la cabeza cual será mi próxima moto, trail creo, para poder vivir la aventura de perderme por el mundo....

Reflexión:

          Mi vida gira alrededor de la moto, cualquier moto que tenga en este momento me vale, sea más o menos funcional, me adaptaré a lo que se me presente en cada momento de mi vida, pero espero y quiero que gire entorno a esto.

          Los que me conocen saben que soy capaz de sacrificar muchas cosas para poder salir un rato a dar un vuelta, sea más o menos cerca, y para el que lo dude, ya le queda claro, no soy ni más ni menos que nadie, solo quiero vivir la vida, que como diría Gandhi, hay gente que está muerta en vida. Este pensamiento lo traslado al resto de mi vida, hay que preocuparse de lo verdaderamente preocupable, de la vida, la salud, los problemas de dinero, trabajo, y tonterías de esas ya vienen solos.

          Un consejo, pensamiento o como lo quieras llamar: Vive la vida ahora y no esperes a vivirla cuando te mueras, disfruta de los tuyos, y levantate cada mañana con una sonrisa, seguro que haces feliz a alguien.

          Si después de leer este "tocho", me haces un comentario, a mí me habrás hecho muy feliz.

Por último, dedicar estas palabras a todos aquellos que han estado, están y sé que estarán a mi lado toda la vida, Carmela, mis padres y hermanos, suegros y cuñados, y a esos amigos que he nombrado y a los que se me pierden por el camino, y a Streaker, que me acuerdo de cuando solo eramos nosotros los que salíamos por ahí, que sé que te hace ilusión que te nombre.

Nos vemos.

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